7) El nostálgico
Para el nostálgico, siempre hubo una cena de empresa que salió mejor. Hace un par de años, el restaurante fue genial y todo el mundo se quedó satisfecho. Además, justo ese año se apuntó todo el mundo a la fiesta posterior y había un ambiente genial. En la discoteca disfrutaron de un espacio sólo para ellos y el DJ estuvo acertadísimo con el repertorio musical. No como este año, claro. Ya nunca se repetirá una cena de empresa tan perfecta como aquella vez.